El etileno es una hormona vegetal gaseosa que controla una amplia gama de procesos fisiológicos en las plantas. Esta hormona puede usarse en postcosecha, de forma controlada, como herramienta para inducir o acelerar la maduración. Además, incluso cuando se encuentra a muy bajas concentraciones, puede inducir efectos negativos que incluyen senescencia, sobre-maduración, pérdida acelerada de calidad, una mayor susceptibilidad a patógenos de la fruta y trastornos fisiológicos. Se han desarrollado técnicas para proteger productos sensibles al etileno. La selección del método de eliminación apropiado depende del vegetal y las técnicas de manipulación utilizadas en su comercialización.